Cambiar
la línea editorial te puede llevar un tiempo, posiblemente a veces más de lo
pensado, pero cuando por “h” no te llega la claridad a la hora de escribir o
por “b” tienes que esperar a la resolución de los problemas, es lógico.
La
verdad es que no me gusta mucho repetirme, me gusta estar cambiando, no quedarme
con la opción de “repeat” y que suene el disco constantemente. Sin duda esa ha
sido una de las grandes lagunas de mi personalidad, este culo de mal asiento me
ha hecho estar hoy donde estoy; podría tener otro tipo de vida que ahora mismo
podría desear, pero no creáis que me arrepiento de algo, consciente tanto de lo
malo como de lo bueno, de los fallos y aciertos, de las oportunidades perdidas
y las venideras. Hay muchos tipos de personas y personalidades forjadas desde
su infancia por sus vivencias que han ido modelando nuestro “Yo actual”.
Si
bien, pienso que nunca se deja de ser un niño y que no es bueno engañarnos con
la palabra “madurez” y lo que conlleva en una sociedad actual, que si no
maduras pareces que no tienes un sitio dentro de ella. Si algo he aprendido de
esta introspección, es que he actuado por impulsos. Esta forma de ser me ha
llevado a ser una persona poco conformista con lo que me tocaba en ese momento
y a no ser capaz de estar sentado en la silla más de 5 minutos. A la vez, esos
impulsos me han llevado a seguir a veces mi propio corazón, llevándome a experiencias
maravillosas y vivencias únicas e irrepetibles.
Con el
paso de los años, los impulsos han disminuido, el latir del corazón ha parado
para dar paso al pensamiento conductivo dentro de un prisma social, el cual me
ha expuesto a una realidad más tenebrosa de lo jamás imaginado. ¿Qué hacer
entonces?
Hace un
par de años me propuse algo difícil, algo que cambiaría mi forma de vida y de
ver las cosas, transformaría mis rutinas y la óptica de este conglomerado de
comunidades. Teniendo presente en todo momento que para mejorar tenía que ser
paciente y constante, por lo tanto, tendría que estar más de 5 minutos sentado
en la silla…, inocente yo, “minutos” jejeje…,más bien horas, días, semanas,
meses y años. Era la hora de afrontar responsabilidades personales y dar un
paso al frente. ¡Empecé con el triatlón!.
Este
deporte me ha transformado, pensaréis que en lo físico, estoy de acuerdo, no lo
voy a negar, es lo que salta a primera vista y toda persona que se embarca en
una travesía como esta tiene que pasar por este primer puerto, para después ir progresando
hasta el siguiente y así sucesivamente. Una vez que alcanzas ese primer punto,
te das cuenta de que has invertido más tiempo de lo imaginado y que ahora
tienes que continuar, no hay marcha atrás, tampoco la deseas. Lo que transmite
este deporte, y más si día a día estás rodeado de personas que comparten el
mismo gusto, no lo encuentras en ningún lado. Te ha atrapado, si llegaste por
decisión propia, olvídate de que de tí salga la palabra abandono, dentro de tí
siempre va estar encendida esa llama, el recuerdo de esas primeras brazadas
unidas a unas pedaladas y una entrada a meta soñada.
Pero
como he dicho, tienes que seguir hasta el próximo astillero y para eso tienes
que mejorar, tanto en cuerpo como en mente, tienes que renunciar a muchas de
las cosas de la vida, tienes que apostar todo a una carta y tienes que tener el
apoyo de las personas que sustentan las patas de la silla. Y eso a veces no es
fácil, si tienes pocas patas te puedes caer a las primeras de cambio y si
tienes mucha puede que no des abasto para complacer a tantas, las justas son lo
ideal y lo difícil. Si eres valiente y crees que merece la pena dejarás fuera
de tu silla. Quiero compartir un pensamiento
que día a día llevo en la mente. Cuando te planteas objetivos en la vida, es
irremediable crear discrepancias y lejanías de las personas que no quieren
verlos, que no los comprenden, pero aunque te pese, si quieres alcanzarlos
debes de hacer lo correcto para obtenerlos, dentro de tí lo sabes. No quieras
complacer a todos, simplemente a los que quieren lo mejor para tí, los que
quieren que alcances tus objetivos, eso es fácil, están contigo. Sin duda,
ellos tomarán decisiones para alcanzar sus metas en la vida o lo que consideren
que les pueda aportar un crecimiento, pero en el caso de no tomarlas…¿De
qué preocuparse?...de no vivir al ritmo
dictado paso a paso…, por favor, tienes una vida por delante, crees que el
tiempo es eterno, no lo desperdicies, sé valiente, a pecho descubierto y ten el
coraje de salir de lo mundano y de pasar a lo extraordinario.
Puede
que no veas brotes verdes en la cercanía, pero sin duda el progreso por el
camino será maravilloso, único y dejará una sensación tan gratificante que la cifra
1h:27m:42s no era un sueño, sino una realidad. Así, poco a poco ves que la cima
está más cerca y más lejos, allí donde tú quieras que esté, la adviertes y te
da fuerzas, ánimo, seguridad para continuar, pero ya no tienes prisa, sabes que
la felicidad está en los pasos pequeños, tangibles y apasionados del camino …..
Estoy
convencido de que al llegar a la cumbre tendrás que haber crecido como
persona, haber comprendido que tienes
que dar más al mundo para poder recibir, porque es el momento de emprender otro
ascenso, no sirve con conformarse, de eso estoy seguro, lo he aprendido; si creces
puedes aspirar más alto.
¡Muchas
gracias a todas las personas con las que he crecido!
Alcanzando
una calidad en tu cuerpo, alcanzas ese bienestar en tu mente, por lo tanto eres
capaz de estar sentado más de 5 minutos, algo pasa a formar parte de tu vida,
es una parte de tí y ahora sólo tienes que seguir nutriéndola con nuevas
motivaciones y objetivos. Te das cuenta en ese descubrimiento interior de
muchas cosas, pero la más importante es que cuando tienes un objetivo claro en
la vida vas a por él, sin importante nada ni nadie, sabes lo que tienes que
hacer y lo haces, te sale de adentro, no es la mente, has vuelto a sentir un
impulso, vuelve a latir el corazón.
Resulta
más fácil empezar a reequilibrar tu vida, distingues los impulsos de los
pensamientos, empiezas a discernir los sueños de la realidad, por lo tanto
encuentras ese equilibrio tan necesario entre cuerpo y alma. Y es en ese
momento cuando dices, ahora quiero potenciar mi auténtico yo, voy a vivir mi
vida, haré en cada momento lo que yo mismo piense y dejaré de lado lo dictado
por la sociedad y el miedo impuesto para acobardar mi auténtico potencial como
persona. Estoy en este mundo, tengo que hacer acto de presencia y defender mi
feudo a muerte. Tengo claro que no se puede escapar del todo, pero buscando la
solución que más me favorezca a mí (se puede), voy a pasar por el aro siempre y
cuando mis principales objetivos personales no los coloquen en la cuerda floja.
Y al
sentir tantas cosas, me di cuenta que había perdido mucho tiempo, el miedo se
apoderó de mi y olvidé la valentía del guerrero que imaginé ser de pequeño, me
sorprendió un mundo nuevo a base del descubrimiento personal, la motivación y
el poder de la mente. Entre tapas y hojas me he decidido a reconducir mi vida y
desde hace unos meses, voy ganando poco a poco la partida a la desesperación y a
la angustia por un futuro sustentado por mis sueños y mis objetivos
conscientes. Esto fue hace unos meses,
cuando engrosé en las filas de los grandes guardianes de este país. He de decir
que los pasos son pequeños, al principio costosos y trabajosos, pero lo más
grande empieza cuando eres consciente de que están dando sus frutos, y siempre
en los momentos más duros.
Tengo
un montón de ideas, alternativas, opciones, papeles para el futuro, pero hoy
toca seguir adoquinando el camino.
En este
viaje, una persona que está conmigo y que evoluciona a la misma vez estaría en
equilibrio, no avanzaría y caería la mayoría. La verdad es que nos apoyamos el
uno en el otro, aunque sea muy tópico decirlo, pero es así. Cuando alguien
tiene unas creencias en algo, está seguro de lo que hace y el camino a seguir.
Tener una persona al lado que las comparta y las defienda al mismo nivel que tú
es muy importante, más si cabe, cuando casi todo al mundo a tu alrededor no las
comparte, ni las entiende…. entonces es el momento de ponerse uno frente al
otro, mirarse y abrazarse con la mayor fuerza posible para que no pase un
resquicio de negatividad y conservar en un gélido frasco los pensamientos.
Una
frase que descubrimos juntos en nuestra búsqueda y que me la enmarcó para que
siempre la tuviera presente, decía:
“Cuando tienes el coraje de avanzar con confianza en la
dirección de tus sueños, empiezas a beneficiarte del poder del universo. La
vida da lo que tú pides. La vida siempre nos está escuchando”
Hoy, en
este blog ciberespacial te la enmarco. Estoy convencido de cada una de las palabras.
La noticia de que tienes que continuar sé que nos ha sentado como un jarro de
agua fría, a tí más que a mí, pero siempre te he dicho que yo siempre sufro de
diferente manera pero que estoy ahí, al lado tuyo siempre, me veas o no.
Los
reveses de la vida son una gran plataforma de despegue para conseguir objetivos
más altos, vamos por el buen camino, sé que es difícil de entender porque uno
pierde la fe y la ilusión. Pero has tenido el coraje de afrontar todo lo pasado,
por qué no lo presente, ya le conoces las orejas a este fiero y agresivo lobo, plántale cara como siempre has hecho y
no pierdas los sueños que te mueven ante este objetivo, todos son alcanzables.
Ahora
es momento de analizar, sentar buenas bases de futuro y empezar con toda la
motivación en las venas, no sirve de nada mirar atrás, es momento de ser
optimista, mantener intactas nuestras ideas y pensar que lo fácil es continuar,
no pararse ni mucho menos rendirse, parte del camino está recorrido.
Maverick:
dícese de aquellas personas que no están marcadas, que actúan con
independencia, inconformismo y ante todo, únicas y originales. Son personas que
no tienen dueño, son ellas las que dictan su vuelo en libertad hacia un destino
bombeado por el libre latir de su corazón. En su afán por perseguir su sueño no
temen nunca al extremismo ni al riesgo al que se pueden ver abocados.
“Enjoy
everything you get. I think that’s one of the most important things in life.
Just really appreciating it. Because we only get to do this once and it’s not
for a very long time, so enjoy it.” - Jay Moriarity
Saludos y Muchas Gracias.