EL 18 de
Marzo tuvo una cita, por segundo año consecutivo (ojala que sean muchos más)
con la media maratón ciudad de Murcia. La verdad que tenía muchas ganas de
correr esta carrera por muchos motivos; El primero por sacarme la espina del
año anterior que lo hice fatal, la segunda de poder mejor mi marca de Orihuela
de hacía un mes y por lo tanto hacer otra mejor marca personal y tercero bajar
de la hora 1h 30´.
Por lo tanto
muchos retos para un solo día y para unos 21km castigados por el sol, radiante
que desde primera hora de la mañana ya calentaba, quien lo iba a decir por esas
fechas y mirar ahora como estamos, en fin, cosas del cambio climático. Y la
verdad que no empezaron para nada bien, porque nada más poner un pie en el
suelo, empiezo a sangrar por la nariz, toma ya!!
Tras cortar
la hemorragia, me dispongo hacer mi ritual de desayuno con esas 3h de
antelación, que hasta el momento me está tratando bien. Preparo todas las cosas
y nos vamos Eri y yo a la zona de salida para recoger el dorsal que está muy
cerca de casa, todo un lujo para un corredor, porque al terminar tienes la
ducha de casa al lado.
Esperando en
la cola me encuentro con el Mister y con Peke, hablamos un poco como hacer la
cosas, de cómo tomarse la carrera con tantas exigencias..etc y nos marchamos a cambiarnos. Decimos de
encontrarnos después, pero no será hasta que llevemos unos cuantos kms en
nuestras piernas.
Empieza el
calentamiento, estoy solo, he perdido a todo el mundo, el Franky no sé donde
esta, son muchos años ya sin correr a su vera, verita mía, la verdad que se le echa
de menos, que buenos tiempos y mejor compañía. Al final del todo nos
encontraremos eso siempre es bueno, afrontar los retos y echarle huevos, hasta
la victoria. Después de un calentamiento un poco raro, es mi talón de Aquiles
tengo que mejorar en este aspecto.
Empieza a las
10.00 en punto la carrera, empiezo a correr con Ángel un amigo del mi época
dorada del futbol, me cuesta entrar en calor y coger el ritmo de 4.30 el km
como consecuencia del calentamiento flojo. Una vez que mis músculos empiezan a entrar en
calor, elevo el ritmo y me lanzo a mi objetivo.
Resumiré
rápido la carrera, la primera vuelta perfecta salvo un pequeño matiz y a la vez
súper importante, no estaba marcando el tiempo necesario para bajar de la 1h
30´, fue como un jarro de agua fría cuando pregunto a un corredor conocido el
tiempo que se iba hacer, yo todo convencido de que estaba para ese tiempo o a
lo mejor menos, pues mi sorpresa es que me dice que van hacer 1h 35´y yo le
estaba pasando, es decir, iba más lento
de lo que debería, pues nada a subir el ritmo, con la consecuencia que
en la segunda vuelta iba a pagar ese exceso de lentitud complementado con ese
acelerón…
Por lo tanto,
una vez que llego al fin de la primera vuelta, siempre con los ánimos de Erika
en ese punto tan importante como es principio, medio y fin de una prueba, me
lanzo sin pensármelo hacia un grupito de corredores buenos, la idea llegar a la
hora y treinta, y apretar en los últimos kms para hacer por debajo de dicha
marca. Pero una vez que paso el km 13 el cuerpo y mi diafragma no carburan bien
y me entra un flato que me revienta por dentro….
En esos momentos mi cabeza
empieza a pensar en mil posibilidades para que se asunte ese dolor o al menos
que disminuya, pero nada, bajo el ritmo, lo subo, hago un pequeño cambio de
ritmo, nada de nada, eso no se va, me quiere joder y me quiere arruinar la
carrera, hay un momento por la avenida de la fama, que digo abandono, paso de
seguir con este sufrimiento y este sin sentido, porque digo esto porque veo que
el grupo en el que iba se van distanciando, no mucho pero si algo considerable,
con lo cual he bajado el ritmo, normal, pero tampoco algo para pensar en el
abandono y es cuando pienso no sigue y continua así, coge al dolor por el
cuello y dile: Hoy no va a ser el día de tu victoria, hoy gano yo!
Y en ese
momento paso por el avituallamiento, cojo una botella de agua y me la tiro por
la cabeza, el contraste de temperatura, me hace que sufra un fuerte espasmo, el
flato quede en un segundo lugar y gracias a esa contracción de todo mi cuerpo,
puedo poco a poco alzar la cabeza y mirar al horizonte, para ser sinceros hay
que decir que desde ese punto de la carrera hasta el final llevare una pequeña
molestia punzante pero nada importante que me haga replantearme otra vez el
retiro.
Llego a la
parte final de la carrera; el barrio del Carmen, este parte es para mí la peor,
mira que la conozco de arriba- abajo pero no consigo acostumbrarme a ella en la
carrera, cuando tu cabeza tiene un recorrido y va en las ultimas, entonces de
repente te cambia un recorrido que se te hace agónico y es donde el año pasado
pinche y dije casi adiós a una buena carrera. No me queda otra que pensar en
positivo y apretar todo lo que pueda mi cuerpo para llegar lo antes posible y
hacer marca persal, y así fue 1h32´.
El objetivo no era el que estaba en
la mente, pues no y en ese momento pues te quedas un poco hundido, más que nada
por el trabajo que llevas haciendo, tanto tiempo entrenando y luego ves a gente
que seguro que no hace tanto como tú y están delante, pero bueno, hay que
aprender de las carreras y siempre aplaudirte y pensar que si no ha sido esta
la tuya es porque hay que seguir trabajando y entrando, y sobre todo
aprendiendo de los errores de un novato.
Para terminar, a veces
pienso que cuando estés listo para recibir una lección determinada, descubrirás
la experiencia o a la persona perfecta que te permitirá aprender esa lección.
Pasará un tiempo antes de que puedas asimilarla, no hay prisa, es un viaje hermoso
y sobre todo confía en que donde te encuentres, sea donde sea, es precisamente
donde debes estar.
El viaje siempre es
mejor que el lugar de destino.
Y siempre ten el valor
de avanzar con confianza hacia tus sueños y de esa manera aprovecharas mejor el
poder de esta vida y del universo.
Saludos y muchas gracias
a todos que hicieron de ese día algo maravilloso e inolvidable.
....And Miñano |